lunes, 25 de octubre de 2010

Obras de Nicolás Maquiavelo

Obras de Nicolás Maquiavelo
  • (1504) Primer decenal.
Crónica en versos de los acontecimientos en Florencia y en Italia en el decenio 1494 a 1504.
  • (1514) Segundo decenal.
Crónica sucesiva que abarca los años 1505 a 1509; inconcluso.
  • (1513 - c. 1515) De Principatibus.
Tratado de política.
  • (1513 - 1517) Discorsi sopra la prima deca di Tito Livio.
Escritos sobre política utilizando, principalmente, los diez primeros libros del historiador romano Tito Livio.
  • (1517) Belfagor, o El diablo que tomó esposa.
Fábula.
  • (1517) El asno.
Fantasía inconclusa en tercia rima sobre la metamorfosis.
  • (1517) Andria.
Comedia, La muchacha de Andros, del dramaturgo romano Terencio, traducida al vernáculo.
  • (1518) La Mandrágora.
Obra de Teatro.
  • (1520) La vida de Castruccio Castrani
Biografía Corta.
  • (1520) Discursus ó Discursos sobre los asuntos públicos de Florencia después de la muerte de Lorenzo el joven.
Propuesta para una nueva constitución.
  • (1521) Arte de la Guerra.
Libro en forma de dialogo.
  • (1520 - 1525) Historias Florentinas.
Historia desde 375 a 1492.
  • (1525) Cliza.
Comedia basada en Casina del dramaturgo romano Plauto.
  • (1525 - 1527) Exhortación a la penitencia.

nicolas maquiavelo Cronología de su Vida 1469 - 1527

Nicolás Maquiavelo
Cronología de su Vida
1469 - 1527
  • 1469
En una antigua familia toscana, nace Nicolás Maquiavelo, el 3 de Mayo.
El Estado florentino es una República, donde los Médicis, de hecho, ejercen la soberanía.
  • 1469-1470
A la muerte de Pedro de Médicis, le suceden sus hijos Lorenzo y Julián.
  • 1478
    (ABRIL) En Florencia: conjuración de los Pazzi contra Lorenzo y Julián, que es muerto.
  • 1492
    (ABRIL) Muere Lorenzo de Médicis, llamado el Magnifico. Lo sucede su hijo Pedro II.
  • 1494
Expedición de Carlos VIII a Italia. Pisa se sacude el yugo de Florencia.
Los Médicis son expulsados de la ciudad. Se proclama la República.
Savonarola es omnipotente en Florencia.
  • 1497
Excomunión de Savonarola.
  • 1498
    Suplicio de Savonarola.
(19 DE JUNIO) A los 29 años, Maquiavelo ingresa en la Cancillería florentina como secretario.
(14 DE JULIO) Además, entrará al servicio de los diez magistrados encargados de la guerra y de los asuntos extranjeros.
  • 1499
    (MARZO) Maquiavelo es enviado en
    misión ante el Señor de Piombino. Ante Catalina Sforza en el mes de julio, ante el ejército que tiene sitiada Pisa.
  • 1500
    Primera legación de Maquiavelo en
    Francia.
  • 1502
    Maquiavelo es enviado en comisión a Arezzo. Acompaña a Urbino, para negociar con César Borgia, a monseñor Soderini, obispo de Volterra y futuro cardenal, hermano de Soderini, que pronto será gonfalonero vitalicio.
Legación de Maquiavelo ante César Borgia en Imola en el mes de octubre.
Maquiavelo presencia el asunto de Sinigaglia.
  • 1503
    Legación de Maquiavelo en Roma, después de la muerte de el Papa Alejandro VI.
  • 1504
    Segunda Legación de Maquiavelo en Francia. Misión a Piombino.
Maquiavelo publica un poema de 500 versos: LA PRIMERA DECENAL.
  • 1505
    Misión de Maquiavelo a Mantua. Misión ante el ejército florentino que sitia Pisa.
  • 1506
    Diversas misiones de Maquiavelo sobre el territorio de la República.
Segunda Legación de Maquiavelo ante el Papa Julio II, al que seguirá en su expedición guerrera.
  • 1507
    Misión de Maquiavelo a Piombino, a Siena, a Bolzano.
  • 1509
    Misión de Maquiavelo ante el ejército que sitia Pisa. Legación en Mantua, en Verona. Maquiavelo publica LA SEGUNDA DECENAL.
  • 1510
    Tercera Legación de Maquiavelo en Francia. Legación en Siena.
  • 1511
Misión de Maquiavelo ante Luciano Grimaldi en Mónaco.
Cuarta Legación de Maquiavelo en Francia.
Maquiavelo es comisionado para reclutar tropas en el territorio de la República.
  • 1512
    Misión de Maquiavelo en Pisa.
Regreso de los Médicis a Florencia y destitución de Maquiavelo.
  • 1513
    Maquiavelo es aprisionado y es liberado después de meses.
Es exiliado de Florencia a su casa de campo en San Casciano.
Sostiene una activa correspondencia con su amigo Francisco Vettori.
Escribe "DE PRINCIPATIBUS" y trabaja al mismo tiempo en los "DISCURSOS SOBRE LA PRIMERA DECADA DE TITO LIVIO".
  • 1514
    Gran actividad literaria de Maquiavelo.
1516
Ofrece a Lorenzo, duque de Urbino, el Tratado de El Príncipe.

  • 1518
Maquiavelo asiste regularmente a las reuniones literarias en los jardines de los hermanos Rucellai en Florencia. Lleva adelante su actividad literaria.
  • 1519
    Maquiavelo es encargado por el cardenal Julio de Médicis, futuro Clenmente VII, de escribir la Historia de Florencia. Termina su libro "EL ARTE DE LA GUERRA".
  • 1521
    Misión confiada a Maquiavelo por el gobierno de los Médicis, ante los Hermanos Predicadores de Carpi.
  • 1525
    Legación de Maquiavelo a Venecia.
  • 1526
    Numerosas misiones de Maquiavelo ante el ejército de la Liga.
  • 1527
Toma de Roma por las tropas imperiales mandadas por el condestable de Borbón.
  • Los Médicis son echados de Florencia. Maquiavelo en misión en Civita-Vecchia ante el almirante Doria.
Regresa enfermo, a Florencia. Muere a los 58 años, el 22 de junio.
Es inhumado en Santa Croce.
  • 1532
    Publicación de "EL PRINCIPE", de "LOS DISCURSOS" Y de "LA HISTORIA DE FLORENCIA

Carta de Maquiavelo a su amigo Vettori


Carta de Maquiavelo a su amigo Vettori
Escrita en 1513


En mis tierras me estoy, y desde mis últimas desventuras no he permanecido, juntándolos todos, ni veinte días en Florencia... Me levanto con el sol y me voy al bosque mío que están talando, donde paso dos horas, inspeccionando los trabajos del día anterior y conversando con los leñadores, que siempre tienen algún pleito entre ellos o con sus vecinos...
Y dejando el bosque, me dirijo a una fuente, y de allí al sitio donde dispongo mis trampas para cazar pájaros, con un libro bajo el brazo: Dante, Petrarca, o uno de los poetas menores, como Tibulo u Ovidio. Leo de sus amores y pasiones que, al recordarme las mías, me entretienen sabrosamente en este pensamiento. Tomo luego el camino de la hostería, donde hablo con los pasajeros y les pido noticias de sus lugares, con lo que oigo diversas cosas y noto los varios gustos y humores de los hombres.
Llega en esto la hora del yantar, en el que consumo con mi familia los alimentos que puede dar esta pobre tierra y mi menguado patrimonio. Después de haber comido, vuelvo a la hostería, donde con el posadero están, por lo común, un carnicero, un molinero y dos panaderos. Con ellos me encanallo jugando a los naipes o a las damas, de lo que nacen mil disputas e infinitas ofensas y palabras injuriosas, y lo más a menudo se combate por un centavo, y hay veces que desde San Casciano se nos oye gritar. Y en esta piojería he de zambullirme para que no acabe de enmohecérseme el cerebro, y para desahogar esta malignidad de mi suerte...
Al caer la noche, vuelvo a casa y entro en mi estudio, en cuyo umbral me despojo de aquel traje de la jornada, lleno de lodo y lamparones, para vestirme ropas de corte real y pontificia; y así ataviado honorablemente, entro en las cortes antiguas de los hombres de la antigüedad. Recibido de ellos amorosamente, me nutro de aquel alimento que es privativamente mío, y para el cual nací. En esta compañía, no me avergüenzo de hablar con ellos, interrogándolos sobre los móviles de sus
acciones, y ellos, con toda humanidad, me responden. Y por cuatro horas no siento el menor hastío; olvido todos mis cuidados, no temo la pobreza ni me espanta la muerte: a tal punto me siento transportado a ellos todo yo - tutto mi trasferisco in loro -. Y guiándome por lo que dice Dante, sobre que no puede haber ciencia si no retenemos lo que aprendemos, he puesto por escrito lo que de su conversación he apreciado como lo más esencial, y compuesto un opúsculo "De Principatibus", en el que profundizo, hasta donde puedo, los problemas de este tema qué es: "la soberanía, cuántas especies hay, y cómo se adquiere, se conserva y se pierde".
A esta carta la tiene los especialistas por la mejor de su género de la literatura italiana; y fuera de estos méritos, sobre los que no nos toca pronunciarnos, consiste sin duda, en sus párrafos últimos, en un admirable documento de poder formativo y libertador de la cultura, de la cultura clásica sobre todo, tal y como la vivieron estos hombres del Renacimiento.
Maquiavelo nos enseña, por haberlo vivido él mismo, cómo siempre será posible, aun en las peores circunstancias, hacer de la sociedad de los grandes espíritus nuestro reino interior; un reino en el que somos invulnerables a todo lo que por el exterior pueda afectarnos, a los casos de fortuna o a la

Maquiavelo y Dios

Maquiavelo y Dios
Su pensamiento


Tener de amigo a Dios es un privilegio, decía el Florentino, que no puede tomarse a la ligera. Se supone que el amigo de los Dioses, escribe Platón en "la República", recibe de ellos lo mejor de las cosas. Moisés, escribe Nicolás, tuvo un gran preceptor en Dios mismo y recibía de él órdenes verbales. En ningún lugar, nuestro autor, examina por extenso su concepción de Dios. Pero diseminadas en sus escritos, hay muchas referencias a Dios. Reunidas, forman un retrato inconfundible. El Dios de Nicolás es el Creador, la Divinidad Principal, Providencial, Real, Universal; el de los muchos nombres, personal, invocable, agradecible, merecedor de reverencia; un juez, justo y clemente, que premia y castiga; aterrador, una fuerza trascendente, separada del mundo pero actuante en él.
"...y el hombre ha sido creado sólo para bien y honor de Dios, quien le dio el habla para que pudiera alabarlo; le dio un rostro no inclinado hacia la tierra, como los animales, sino orientado hacia el cielo para que pudiera contemplarlo continuamente; le dio las manos para que pudiera construir templos, hacer sacrificios en su honor; le dio la razón y el intelecto para que pudiera especular y conocer la grandeza de Dios... Pensad por tanto cómo todas las cosas hechas y creadas, son hechas y creadas en beneficio del hombre..."

relacion entre laquiavelo y la ciencia moderna en el ambito de las ideas politicas

relacion entre laquiavelo y la ciencia moderna en el ambito de las ideas politicas


La llegada de la ciencia política como una disciplína universitaria en Estados Unidos es evidente por el nombramiento de facultades y de directores de facultades llevando el título de ciencia política, poco tiempo después de la guerra civil. En 1857, Francis Lieber fue nombrado como el primer Profesor de Historia y Ciencia Política en la Universidad Columbia. En 1880, Columbia formó la primera Escuela de Ciencia Política. La disciplína estableció la Asociación Americana de Ciencia Política en 1903. La integración de estudios políticos del pasado en una disciplina unificada es un proyecto en curso, y la historia de la ciencia política ha proporcionado un campo rico para el crecimiento de ambas ciencias políticas (normativa y positiva), con cada parte de la disciplína compartiendo algunos predecesores históricos.
En las décadas de 1950 y 1960, una revolución de conducta haciendo énfasis en el estudio científico y riguroso del comportamiento individual y grupal barrió la disciplína. Al mismo tiempo de que la ciencia política avanzaba hacia una mayor profundidad de análisis y más sofisticación, también avanzaba hacia una relación de trabajo más cercana con otras disciplínas, especialmente con sociología, economía, historia, antropología, psicología y estadística. De manera creciente, estudiantes de conducta política han usado el método científico para crear una disciplína intelectual basada en el postulado de hipótesis seguidas por la verificación empírica y la inferencia de tendencias políticas, y generalizaciones que explican acciones políticas individuales y de grupo. A través de la generación pasada, la disciplina puso un énfasis creciente en la relevancia o el uso de nuevos enfoques y metodologías para resolver problemas políticos y sociales.
In 2000, el auto-llamado Movimiento Perestroika fue introducido como una reacción en contra de los partidarios del movimiento llamado la matematización de la ciencia política. Los perestroikanos se pronuncian por una pluralidad de metodologías y enfoques en ciencia política y por una mayor relevancia de la disciplína para aquellos afuera de ella.

 


El surgimiento de la ciencia moderna en la Edad Media.


La ciencia moderna no surgió en oposición al espíritu de la Edad
Media, sino del seno del mismo y, concretamente, de las exigencias que
imponía la creencia generalizada en la inminencia del apocalipsis, según una
nueva teoría histórica.

Esa es la tesis central de un libro reciente del medievalista alemán
Johannes Fried en el que sostiene que el comienzo de la ciencia se dio por
el deseo de buscar cálculos precisos que pudieran predecir con exactitud el
esperado fin del mundo.


Esa necesidad le dio ante todo un impulso a la astrología y a la astronomía,
que tuvieron un momento de esplendor en la alta Edad Media después de que el
mundo occidental se apropiara de muchos conocimientos de la antigüedad
clásica y del mundo árabe.

En el esfuerzo por predecir con exactitud el advenimiento del apocalipsis,
sin embargo, la astrología y la astronomía empezaron poco a poco a liberarse
de su determinación originalmente religiosa y, según dice Fried, a crear y
ampliar su propio repertorio de preguntas.

Idea repetida en la historia

El punto de partida de Fried es mostrar como, desde su creación en el Libro
de Daniel y en el Apocalípsis de San Juan, la idea de la inminencia del fin
del mundo empezó a formar parte de la consciencia colectiva y siguió
perteneciendo a ella incluso hasta los tiempos de Isaac Newton y el
descubrimiento de la ley de la gravedad.

El propio Newton, señala Fried, fue influido por la idea del fin del mundo e
incluso hizo sus propios intentos por dar una interpretación al Apocalipsis.

El segundo paso de Fried es mostrar como se pasó de esperar el fin del mundo
a tratar de ver su inminencia a través de la interpretación de datos del
mundo exterior entre los que se contaban tanto fenómenos meteorológicos como
astronómicos.

Sin embargo, al interpretar esas señales, vistas inicialmente como signos de
Dios, se hallaban una y otra vez causas naturales de las mismas y los sabios
medievales empezaron a revisar los fundamentos de su pensamiento

Por otra parte, el libro de Fried, "Ascenso desde el hundimiento. El
pensamiento apocalíptico y el surgimiento de las ciencias naturales en la
Edad Media", apunta también a la paradoja de que, con los siglos, esa misma
visión científica del mundo hizo factibles las predicciones sobre el fin del
mundo.

 


El surgimiento de la ciencia moderna en la Edad Media.


La ciencia moderna no surgió en oposición al espíritu de la Edad
Media, sino del seno del mismo y, concretamente, de las exigencias que
imponía la creencia generalizada en la inminencia del apocalipsis, según una
nueva teoría histórica.

Esa es la tesis central de un libro reciente del medievalista alemán
Johannes Fried en el que sostiene que el comienzo de la ciencia se dio por
el deseo de buscar cálculos precisos que pudieran predecir con exactitud el
esperado fin del mundo.


Esa necesidad le dio ante todo un impulso a la astrología y a la astronomía,
que tuvieron un momento de esplendor en la alta Edad Media después de que el
mundo occidental se apropiara de muchos conocimientos de la antigüedad
clásica y del mundo árabe.

En el esfuerzo por predecir con exactitud el advenimiento del apocalipsis,
sin embargo, la astrología y la astronomía empezaron poco a poco a liberarse
de su determinación originalmente religiosa y, según dice Fried, a crear y
ampliar su propio repertorio de preguntas.

Idea repetida en la historia

El punto de partida de Fried es mostrar como, desde su creación en el Libro
de Daniel y en el Apocalípsis de San Juan, la idea de la inminencia del fin
del mundo empezó a formar parte de la consciencia colectiva y siguió
perteneciendo a ella incluso hasta los tiempos de Isaac Newton y el
descubrimiento de la ley de la gravedad.

El propio Newton, señala Fried, fue influido por la idea del fin del mundo e
incluso hizo sus propios intentos por dar una interpretación al Apocalipsis.

El segundo paso de Fried es mostrar como se pasó de esperar el fin del mundo
a tratar de ver su inminencia a través de la interpretación de datos del
mundo exterior entre los que se contaban tanto fenómenos meteorológicos como
astronómicos.

Sin embargo, al interpretar esas señales, vistas inicialmente como signos de
Dios, se hallaban una y otra vez causas naturales de las mismas y los sabios
medievales empezaron a revisar los fundamentos de su pensamiento

Por otra parte, el libro de Fried, "Ascenso desde el hundimiento. El
pensamiento apocalíptico y el surgimiento de las ciencias naturales en la
Edad Media", apunta también a la paradoja de que, con los siglos, esa misma
visión científica del mundo hizo factibles las predicciones sobre el fin del
mundo.